No hay dudas de que a pesar de la amplia aceptación de los prácticos atornilladores/destornilladores eléctricos, ya sea con cable o inalámbricos, que la tecnología ha puesto hoy en nuestras manos a precio accesible, sus progenitores, los tradicionales destornilladores manuales, todavía dan y seguramente darán mucho que hablar en el futuro. Después de todo, ¿quién no tiene algún destornillador en su casa o no ha manipulado uno alguna vez?
No obstante la enorme sencillez y popularidad del clásico destornillador manual, es también muy cierto que el uso del destornillador equivocado terminará arruinando la herramienta, la pieza de trabajo e incluso podrá provocar lesiones al usuario. Por lo tanto, podemos concluir que el destornillador es muy simple, pero exige respeto. Y para ello, hay que conocer bien sus características, diseños, tipos y usos, todo lo cual trataremos de abordar en este artículo.
Los primeros destornilladores se remontan a principios del siglo XV, cuando los requerimientos bélicos de los albores de la Edad Moderna ya habían dictado la irrupción de los tornillos y, consecuentemente, se necesitaba de un dispositivo que encajara en la cabeza de los tornillos para poder insertarlos en las armaduras y maquinaria de guerra de la época.
En estos 6 siglos que transcurrieron desde entonces, la tecnología de los tornillos y sus dispositivos de inserción no cambió mucho, salvo por un detalle: el desarrollo de más y más tornillos con innumerables tipos de cabeza diferentes y, por ende, la introducción de diversas clases de destornilladores. Esto significa que si hay tantas clases de destornilladores (que potencian consecuentemente el uso del destornillador inadecuado) es porque se diseñan para adaptarse al tipo de cabeza de la gran cantidad de tornillos existentes.
Cabe preguntarse entonces, ¿por qué hay tantas cabezas diferentes de tornillos?
La respuesta es simple: porque los tornillos no están estandarizados. Y ello obedece a razones de diseño. Por lo tanto, un buen comienzo es conocer los tipos más comunes de cabezas de tornillos y sus destornilladores correspondientes. Pero antes, vayamos a un concepto aún más básico.
¿Qué partes componen un destornillador?
Como apreciamos en la siguiente figura, existe una serie de piezas principales para distinguir en esta simple herramienta, cada una con sus características respectivas.
Mango: es la parte por la que sujetamos la herramienta y también en la que se ejerce la fuerza para hacerla funcionar. El mango puede ser de diferentes materiales, tales como madera, PVC y otras resinas plásticas. Las marcas reconocidas ofrecen destornilladores con mangos construidos en una combinación anti-resbaladiza de dos componentes plásticos, acompañada de un diseño ergonómico que brinda al usuario un agarre óptimo y confortable, al tiempo que permite una máxima transmisión del torque al cuerpo de la herramienta. Otros diseños incluyen mangos aislantes, que proporcionan protección contra la corriente eléctrica.
Núcleo: es la parte que une el mango con el cuerpo, por lo que debe estar provisto de alta resistencia a esfuerzos mecánicos si lo que buscamos es un producto de excelente calidad que sea capaz de asegurarnos una larga vida útil.
Cuerpo: también conocido como varilla, vástago o cuña, es una barra de acero, que en piezas de calidad se trata de acero de alta aleación que combina elementos de gran dureza como cromo, vanadio y molibdeno para asegurar durabilidad y resistencia superiores. La longitud y el espesor del cuerpo varían según el tipo de destornillador. Forman parte del cuerpo los siguientes componentes:
Hoja: conocida también como pala o boca, es la parte inferior del cuerpo que se hace más aguda hasta terminar en la punta. Su altura y perfil varían dependiendo del tipo de punta que tenga el destornillador, si bien muchas veces la hoja se considera en conjunto con la punta. Por ejemplo, es común que muchos se refieran a destornilladores de hoja plana o destornilladores de hoja Phillips, aunque el diseño plano o Phillips corresponda más bien a la punta, aun cuando, como veremos seguidamente, las hojas de uno u otro tipo son diferentes.
Punta: también denominada cabeza, es la parte más importante, ya que es la que realmente hace contacto en la cabeza del tornillo para hacerlo girar. La diferencia de tipos de punta depende obviamente del tipo de tornillo, por lo que varían ampliamente en longitud y espesor del filo, así como en su forma. Muchas puntas son de color negro porque presentan un mecanizado de alta precisión, permitiendo obtener dimensiones estrictamente calibradas y protección contra la oxidación.
El video de abajo ilustra cómo se fabrica un destornillador común.
Ahora que conocemos las partes de un destornillador manual, retomemos lo que veníamos tratando acerca de la multiplicidad de cabezas de tornillo y veamos en consecuencia cuáles son los tipos más comunes de destornilladores que encontraremos en el comercio, algunos de los cuales resume la siguiente figura.
Tipos de destornilladores
a) Destornilladores planos
Las primeras cabezas de tornillos eran de ranura plana, por lo que se requería un destornillador de cabeza ranurada plana o destornillador plano. Sin embargo, con el advenimiento de la industria automotriz a comienzos del siglo XX, surgió la necesidad de mejores cabezas, por lo que rápidamente se adaptaron destornilladores que ofrecían un centrado más sencillo y se mantenían firmemente en su posición. Pero de esos destornilladores nos ocuparemos más adelante.
Hoy en día, los destornilladores planos presentan dos tipos de punta: recta y cónica, que se adaptan a las diversas necesidades.
Los tornillos de cabeza plana ranurada son baratos y fáciles de fabricar, y constituyen una buena opción para las aplicaciones que requieren su accionamiento manual, por lo que los destornilladores manuales son la herramienta adecuada para apretarlos o aflojarlos. La fabricación de muebles y gabinetes son dos áreas donde comúnmente se encuentran tornillos ranurados planos, de manera que los destornilladores planos son muy usados por carpinteros y armadores de mobiliario.
Sin embargo, este tipo de tornillo es el más inseguro, ya que el destornillador muchas veces resbala, zafa o se desliza de la ranura del tornillo, obligando a detener el proceso de trabajo. Por este y otros motivos, los tornillos/destornilladores planos están perdiendo popularidad en detrimento de otros diseños más seguros y avanzados.
b) Destornilladores Phillips
Otra desventaja de los tornillos de cabeza plana es que no son muy útiles cuando se trata de la producción industrial. Problemas como un centrado deficiente y la facilidad de zafar o deslizarse de la punta del destornillador llevaron al inventor Henry Phillips a patentar en los años ’30 el tornillo en forma de cruz que lleva su nombre. El tornillo Phillips produce el centrado automático del destornillador correspondiente, lo que facilita su rápida colocación.
Con el advenimiento de los destornilladores eléctricos, la punta Phillips resultó ampliamente favorecida, ya que con la gran potencia de la herramienta los problemas de deslizamiento se redujeron considerablemente en comparación con las puntas planas. Es por ello que actualmente este tipo de cabeza de tornillo es posiblemente el más comúnmente encontrado en casi cualquier aplicación, principalmente la fabricación de muebles, electrónica, joyería y carpintería, entre otros. Los destornilladores eléctricos no solo aceleran el proceso, sino que también ayudan a garantizar que el tornillo ingrese totalmente recto en la pieza de trabajo.
A pesar de su uso tan difundido, los tornillos Phillips aún tienen problemas, ya que la cabeza es susceptible de deformarse si se somete a un fuerte torque por parte del destornillador. Este fenómeno de deformación da lugar a tornillos que, dependiendo del país o región, se conocen como tornillos barridos, pasados de rosca, mellados, etc.
Por este motivo, surgieron otras cabezas más convenientes, que abordan tanto el deslizamiento como la deformación debidos al torque excesivo, problemas que se conocen colectivamente como «efecto cam-out». Veamos algunos ejemplos.
c) Destornilladores Pozidriv
Prosiguiendo con las cabezas de tornillo en forma de cruz, el diseño Pozidriv patentado en los años ’60 incorpora cuatro guías adicionales a 45 grados, si bien las dimensiones de sus ranuras son similares a las dimensiones de ranuras Phillips, por lo que se trata de un tornillo Phillips mejorado, que se usa principalmente en Europa y en aplicaciones en electrónica.
Los destornilladores Pozidriv tienen la ventaja de que, al contar con cuatro puntos de contacto adicionales, reducen aún más las posibilidades de deslizamiento de un destornillador Phillips, por lo que puede aplicarse más torque sin dañar la cabeza.
Sin embargo, para minimizar el efecto de deslizamiento, los fabricantes realizan un recubrimiento de superficie especial en la punta del destornillador, es decir, que si vamos a emplear un destornillador Pozidriv, es recomendable adquirirlos con la punta recubierta para obtener el mejor rendimiento y la máxima calidad.
d) Destornilladores Torx
El efecto indeseable de deslizamiento del destornillador de la cabeza del tornillo desaparece completamente cuando se trata de cabezas de perfiles paralelos. Estos perfiles son los que ofrecen los tornillos en estrella, hexagonales o cuadrados.
Uno de los diseños en estrella es la cabeza Torx, que incorpora una estrella de seis puntas redondeadas. Como no hay ángulos involucrados, se ofrece una gran área de contacto entre el tornillo y el destornillador, lo que significa que estos tornillos se pueden apretar a valores de torque muy elevados.
No obstante, las cabezas de los tornillos Torx son relativamente poco profundas, por lo que se debe tener cuidado de que no haya suciedad u otro material sólido en las mismas que puedan reducir el área efectiva de contacto entre la cabeza y el destornillador. Los destornilladores Torx tienen un amplio uso en la industria automotriz.
e) Destornilladores hexagonales o tipo Allen
Otro diseño sumamente eficaz que asegura un excelente contacto es el de cabeza hexagonal o tipo Allen, de cuyos detalles nos ocupamos oportunamente en este artículo.
Aunque es más común encontrar llaves Allen como las mencionadas en el artículo citado, también podemos adquirir destornilladores Allen, tanto en mango recto como en «T», tal como muestra la siguiente figura. Se usan principalmente en el ensamble de mobiliario.
f) Destornilladores Robertson
Patentada por el inventor canadiense P.L. Robertson en 1908, esta cabeza cuadrada fue rápidamente adoptada por la Ford Motor Company en razón del sencillo centrado del destornillador correspondiente, desplazando al tornillo ranurado de entonces para los métodos de producción en masa.
La mayor popularidad del tornillo Robertson no vino de la mano de los destornilladores manuales, sino tras la irrupción de los destornilladores eléctricos. Hoy en día se usa ampliamente en proyectos de construcción y remodelación en madera, particularmente en la instalación de contrapisos, que es mucho más rápida si se usa un destornillador eléctrico y una broca Robertson.
Otros tipos de destornilladores
Aunque el diseño de la cabeza del tornillo es primordial para la elección correcta del destornillador, también se comercializan destornilladores de distintos tamaños de mango y/o cuerpo. Por ejemplo, un diseño típico es el que presentamos a continuación.
a) Destornilladores extracortos o carroceros
La particularidad de este tipo de destornilladores es que se adaptan para introducir tornillos grandes en espacios reducidos. Mientras el mango es del tamaño de un destornillador común, el cuerpo es muy corto, con una pala pequeña y una punta ancha.
Los destornilladores carroceros pueden tener punta plana o Phillips y son muy usados tanto en mecánica del automóvil como en talleres de herrería, carpintería y afines.
b) Juegos especiales de destornilladores
i) Juegos mixtos o individuales de destornilladores
Como ocurre con otras herramientas manuales de su catálogo, muchos fabricantes ofrecen juegos de distintos tipos y/o tamaños de destornilladores en presentaciones que pueden ser en blíster, caja o soporte organizador.
En su mayoría, los juegos mixtos se componen de los tipos más comunes de destornillador, es decir, plano y Phillips. Así, por ejemplo, podemos encontrar juegos de 5 o más destornilladores de punta plana cónica o recta y punta Phillips de diversos tamaños, como muestra esta figura.
Sin embargo, para clientes más especializados, también se ofrecen juegos de un mismo tipo de destornillador en distintos tamaños, por ejemplo, juegos compuestos de 6 o 12 destornilladores Torx, destornilladores planos o destornilladores Phillips solamente, de manera que puedan adaptarse a los distintos requerimientos del usuario.
ii) Juegos de destornilladores aislados y de acero inoxidable
La gama de herramientas aisladas (con código 1000 V, de uso imprescindible en las proximidades de equipos con electricidad expuesta o en circuitos eléctricos con corriente) y las de acero inoxidable (exclusivas para uso en agroalimentaria, salas blancas, laboratorios o el ámbito médico) también abarca los destornilladores, los cuales habitualmente se comercializan en juegos, principalmente en los diseños plano, Phillips y Pozidriv.
iii) Juegos de destornilladores ecológicos
Finalmente, y siguiendo las nuevas tendencias que dominan las herramientas del futuro, algunos fabricantes reconocidos han introducido su gama de destornilladores planos y Phillips que son amigables con el medio ambiente. Se trata de herramientas fabricadas con materiales reciclados mediante procesos realizados de manera sostenible, desde las materias primas hasta el tratamiento final de los residuos generados.
Es así como el mango está constituido por un 25% de una mezcla de aluminio y polipropileno proveniente de envases reciclados, en una composición que garantiza tanto la calidad como los estándares de robustez, resistencia a la llama, ataque de solventes y aislación eléctrica. El cuerpo presenta un tratamiento superficial con cromo trivalente y el empaque se confecciona con material de fibra reciclada.
Los que acabamos de presentar en este artículo son apenas los tipos más comunes de destornillador. De hecho, existen muchos otros, como los destornilladores de carraca con y sin resorte en espiral, destornilladores de mango estriado, destornilladores de relojero, destornilladores para tornillos de seguridad que impiden la manipulación no autorizada, y más aún. Sion embargo, estas herramientas atienden necesidades puntuales y raramente formarían parte de la caja o el carro de herramientas del aficionado o el profesional contratista.
2 Comentarios
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Deco&Lemon
¡Un post muy necesario! El mercado ofrece una amplia variedad de destornilladores, y cada uno tiene una función. Por ello, es necesario saber diferenciar cada modelo.
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Lazaro Morales Yañez
Muy buen material, excelente.