La velocidad variable en una amoladora es una característica que permite realizar trabajos y utilizar discos abrasivos que, de otro modo, no podríamos usar. La velocidad angular determina, de acuerdo al diámetro del disco, la velocidad lineal en la superficie o borde.
Todos los discos abrasivos especifican la velocidad máxima a la que pueden operar dentro de los márgenes de seguridad; esta velocidad puede estar expresada en metros por segundos en los discos más viejos, o en revoluciones por minuto en los más nuevos. La velocidad variable en una amoladora permite trabajar con distintos discos abrasivos o de pulido con seguridad y sin cambiar de máquina ni utilizar costosos choppers o variadores externos.
Velocidad variable en una amoladora: ¿para qué?
Las amoladoras más económicas suelen tener una o dos velocidades fijas; así, sólo se pueden utilizar con determinados discos abrasivos —aquellos cuya velocidad lineal máxima es superior a la que ofrece la amoladora— por lo que, en ese sentido, son máquinas limitadas.
La velocidad variable en una amoladora permite utilizar distintos discos, con sus correspondientes usos, lo que hace de esta máquina una herramienta mucho más versátil. Por lo general las velocidades varían entre 900 RPM y 12 000 RPM; rango suficiente para abarcar la gran mayoría de los discos abrasivos y de pulido que existen actualmente en el mercado.
Velocidad angular y velocidad lineal o tangencial
La velocidad angular —expresada en revoluciones por minuto o rpm— al variar, determina también un cambio en la velocidad lineal en el borde del disco. Naturalmente, a distintos diámetros, para una misma velocidad angular, tendremos distintas velocidades lineales en los bordes. La fórmula:
permite calcular, a partir de la velocidad en rpm, la velocidad del disco en radianes por segundo. Aquí 𝛚 indica la velocidad angular, medida en radianes por segundo. T es el tiempo, en segundos, que tarda el disco en girar 360º, y f es la velocidad en revoluciones por segundo.
La velocidad tangencial t (o lineal) estará dada por el producto 𝛚 · r. Si, por ejemplo, tenemos una amoladora con un disco acoplado que gira a 1000 rpm, y su diámetro es de 28 mm, tendremos una velocidad tangencial:
t = 2 · π · f · r
Por lo tanto:
t = 2 · π · (1000/60) · 14
Entonces:
t ≅ 1465,5 mm/s
Esto nos da un valor aproximadamente igual a 1,5 m por segundo (unidad estándar utilizada en la industria de los abrasivos), lo que equivale a 90 metros por minuto.
¿Por qué es necesario variar la velocidad de los discos?
No todas las superficies admiten la misma velocidad de abrasión. Existen además discos que no son abrasivos: cepillos, estopas y otros sirven para pulir y abrillantar; su velocidad máxima debe ser reducida para no quemarlos o romperlos.
Los discos expresan su velocidad máxima en revoluciones por minuto (rpm). Por lo general esa velocidad máxima está en relación al diámetro original del disco; a medida que se desgasta, la velocidad tangencial, a la misma rpm, disminuye, con lo que nunca habrá riesgos de operación.
Algunas velocidades máximas
Las velocidades máximas de trabajo se codifican según un sistema de códigos de colores, con origen en las normas alemanas DIN EN 12413, DIN EN 13743 y DIN EN 13236, y quedan expresadas en metros por segundo —velocidad tangencial en el borde del disco—.
Color | Velocidad máxima (en metros por segundo) |
Azul | 50 |
Amarillo | 63 |
Rojo | 80 |
Verde | 100 |
Este sistema está cayendo en desuso, en favor de imprimir la velocidad máxima en revoluciones por minuto, algo mucho más intuitivo y fácil de calcular por parte del operador.
Existen distintos materiales que poseen una velocidad de trabajo límite —expresada, nuevamente, en metros por segundo— que pueden tabularse del siguiente modo:
Material | Velocidad máxima en metros por segundo | Velocidad en RPM para discos de diámetro 127 mm |
Discos de fieltro duro prensado | 37 | 5565 |
Cepillo mil hojas de láminas pequeñas | 40 | 6016 |
Discos de láminas abrasivos | 40 | 6016 |
Muelas de copa Kronenflex | 50 | 7520 |
Ruedas abrasivas | 50 | 7520 |
Disco de limpieza NCD 200 | 63 | 9475 |
Discos de fibra | 80 | 12032 |
Discos de tronzado y de desbaste Kronenflex | 80 | 12032 |
Discos abrasivos de láminas | 80 | 12032 |
Discos de tronzado diamantados | 80 | 12032 |
Platos lijadores diamantados | 80 | 12032 |
Regulación de la velocidad
En la mayoría de las amoladoras el control de velocidad es un dial ubicado en la parte trasera de la herramienta; al girarla es posible seleccionar distintas posiciones, que corresponden a velocidades pre-establecidas. Estas pueden ser cinco, seis o cuatro; todas ellas incorporan en el manual del usuario una tabla en donde es posible consultar esas velocidades de operación.
La velocidad se puede variar mientras la máquina está girando; esto es útil cuando el disco tiene una aplicación que permite utilizarlo a velocidad baja o media, como algunos cepillos de pulido. En otros casos convendrá seleccionar la velocidad antes de encender el motor, para evitar desgastes por velocidad insuficiente, o accidentes debidos a una velocidad excesiva.
2 Comentarios
jhulio
porque la maquina amoladora demoraen revolucionar
david castro
consulta, entoendo que la velocidad de trabajo de la amoladora debe ser menor a la del disco que se use, pero cual seria la relaicon cuantas rpm mas deberia tener el disco con respecto a la amoladora