A lo largo de diversos artículos en De Máquinas y Herramientas, ya hemos mencionado los discos como la herramienta principal de máquinas eléctricas como amoladoras, ingletadoras, sierras circulares, esmeriladoras, rectificadoras y otras.
Es tal la variedad existente de discos para herramientas eléctricas que, frecuentemente, la perspectiva de su uso genera confusión o conduce a elecciones equivocadas por parte del usuario inexperto. En una serie de artículos dedicados a estos discos, vamos a profundizar detalles para conocer al menos los principales tipos que ofrece actualmente el mercado, como así también sus aplicaciones.
En este primer artículo veremos las características y las diversas formas en que pueden clasificarse los discos para herramientas eléctricas, dependiendo de un conjunto de parámetros fundamentales a la hora de efectuar la selección correcta.
Para empezar, y antes de brindar especificaciones, debemos efectuar un par de distinciones que abrirán el complejo panorama. Los cientos de discos para herramientas eléctricas que podemos encontrar en los comercios especializados deben necesariamente clasificarse en dos amplias categorías generales que detalla el siguiente gráfico:
Los discos sin dientes son los conocidos comúnmente como “discos abrasivos” y están construidos de granos abrasivos y una serie de capas de elementos que veremos a continuación. Se emplean para toda clase de materiales y están disponibles en una gran variedad de modelos, cuyo diseño y composición dependen del uso.
Los materiales esenciales que componen un disco abrasivo son tres:
- Material de corte: denominado “grano abrasivo”, es el elemento esencial del disco porque realiza la función de corte, cubre la superficie del disco y su dureza debe ser mayor que la pieza de trabajo.
- Material aglutinante: es el que permite la unión de los granos abrasivos, puede ser natural o artificial y confiere resistencia y dureza al disco. La fortaleza con la que el aglutinante mantiene unidos los granos abrasivos determina el “grado” del disco, el cual, a su vez, puede afectar la velocidad del disco y la profundidad del corte o desbaste.
- Material de malla: es el refuerzo mecánico que impide la fractura del disco. Generalmente, el material de malla consta de una o más capas de fibra de vidrio.
El siguiente video ilustrativo nos mostrará más detalles interesantes sobre los discos abrasivos, como así también los datos que encontramos en la etiqueta de un disco y su significado.
Por otra parte, los discos dentados son de acero y presentan, como lo indica su nombre, una hilera de dientes de diversas formas, con punta de widia o diamante, y se emplean para todo tipo de madera y materiales blandos tales como metales (aluminio y bronce), plástico, yeso y laminados, entre otros.
Con respecto a las funciones que cumplen los discos para herramientas eléctricas, estas son muy distintas y no pueden emplear los mismos discos, a menos que estos estén especialmente diseñados para más de una función.
Las funciones principales de los discos para herramientas eléctricas son dos y las vemos en el siguiente gráfico:
También existe una variedad de discos especialmente diseñados para otras funciones distintas de corte y desbaste, tales como afilado de herramientas, lijado, pulido, eliminación de restos de soldadura, eliminación de rebabas, limpieza, acabado, etc. Estas funciones emplean discos cuyas formas, composiciones y condiciones de uso son completamente diferentes entre sí y varían según la aplicación.
Teniendo en cuenta estas dos grandes categorías que acabamos de ver, la diversidad de subcategorías que se desprende de ambas es numerosa. Conozcamos qué otros grupos de discos para herramientas eléctricas podemos distinguir.
Los discos abrasivos, por ejemplo, conforman un vasto grupo que justificará un próximo artículo en De Máquina y Herramientas. Por el momento, detallaremos tres de los parámetros presentados en el video anterior que sirven para distinguirlos.
La correcta combinación de material de corte y aglutinante permiten la existencia de discos abrasivos que cubren las necesidades más exigentes. Así, por ejemplo, los discos de óxido de aluminio con aglutinante cerámico son muy comunes y económicos, aunque poseen baja resistencia al choque mecánico y térmico. En cambio, los discos que contienen resina son más flexibles por la naturaleza elástica del aglutinante y, por lo tanto, son más resistentes.
Los discos de tipo cóncavo o centro deprimido se usan principalmente para desbaste y, a diferencia de los planos, usados tanto para corte como para desbaste, tienen la ventaja de ocultar la parte del eje y la tuerca de sujeción de la amoladora para que estos no interfieran con la operación que se está ejecutando.
Los discos flap presentan un conjunto de múltiples hojas de tela abrasiva, ubicadas de forma radial y montadas sobre una base de plástico o fibra de vidrio, con gran poder de desbaste y un suave acabado de la superficie.
Por lo que hemos visto hasta ahora, es claro que no puede emplearse el mismo disco, por ejemplo, para cortar aluminio o hierro fundido, o mármol y cerámica. Cada material o grupo de materiales exige el uso de un disco en particular, y en base a ello podemos efectuar más distinciones como muestra la tabla que sigue.
Otras de las características que establecen distintas categorías entre los discos para herramientas eléctricas tienen en cuenta el diámetro de los mismos, lo que, a su vez, está relacionado con el tipo de máquina en la que se usarán.
Así, por ejemplo, tanto los discos abrasivos como los dentados a emplear en operaciones tanto de corte como de desbaste u otras, vienen de distintos tipos, diámetros y composiciones según su empleo en máquinas estacionarias o fijas, máquinas portátiles y máquinas sensitivas (manuales). La siguiente tabla muestra algunos ejemplos.
Los usuarios de herramientas eléctricas pueden lograr un mejor provecho de sus máquinas cuando cuentan con la información adecuada y lo mismo ocurre con los accesorios para esas herramientas. Aún los que aparentemente se consideran elementos de menor importancia, como los discos, tienen su propia terminología, dimensiones, aplicaciones y sistemas de identificación que se vuelven críticos al momento de obtener la mejor performance.
Más adelante, en futuros artículos, ampliaremos la información brindada en esta página con más detalles que posibilitarán la elección correcta de nuestros discos para herramientas eléctricas.
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