Las tradicionales cintas métricas o flexómetros han existido durante mucho tiempo. Podríamos pensar que con el auge de los medidores láser para distancia ofrecidos hoy en día, la vieja cinta métrica ha pasado a un segundo plano. Pero nada más lejos de la verdad.
El legendario formato de la cinta metálica enrollable alojada en una carcasa (las primeras fueron de madera) no solo sigue muy vigente como una de las herramientas de medición más simples y versátiles que benefician tanto a profesionales como a aficionados, sino que con el tiempo ha visto la introducción de notables mejoras que hacen el dispositivo cada vez más preciso, útil y seguro. Basta mencionar que los modelos actuales incluyen componentes como ganchos para asegurar al cinturón, mecanismos de bloqueo dentro de la carcasa para facilitar el almacenamiento, así como robustos materiales plásticos que conforman la carcasa, haciéndola cada vez más duradera.
Por estos motivos, si vamos a adquirir una cinta métrica en el comercio, es importante estar al tanto de sus principales características y atributos para decidir en cuáles debemos hacer hincapié, según las necesidades dictadas por el uso que vamos a darle a la cinta.
En primer lugar, conozcamos entonces cómo está compuesta una cinta métrica, y para ello observemos la siguiente figura que muestra los elementos principales.
Hoja o fleje
Es el componente funcional de una cinta métrica, es decir, el que efectúa las mediciones. Se trata esencialmente una regla graduada flexible y enrollada como si fuera una cinta adhesiva, dentro de la carcasa.
Hay tres materiales comúnmente usados en la fabricación de la hoja de una cinta métrica:
- Acero
- Acero inoxidable
- Fibra de vidrio
Cada material tiene sus propias características que se resumen a continuación, para ayudarnos a tomar la decisión correcta.
Acero: es el material más común para la fabricación de las hojas de las cintas métricas. El acero no solo es duradero y práctico, sino que también ofrece una excelente relación calidad-precio para el usuario promedio. Las cintas de acero casi siempre vienen con un recubrimiento amarillo brillante de alta visibilidad, y presentan marcas convencionales de color negro y rojo en toda su longitud.
Acero inoxidable: es ideal para los que trabajan en ambientes húmedos, salitrosos o fangosos, aunque su costo es bastante más elevado que el de una hoja de cinta de acero convencional. No obstante, el gasto extra se justifica ampliamente si se tiene en cuenta que el acero inoxidable es prácticamente resistente a la corrosión, por lo que para aquellos que deben efectuar mediciones en lugares expuestos a condiciones rigurosas, una hoja de acero inoxidable puede significar una gran diferencia.
Fibra de vidrio: las cintas con hoja de fibra de vidrio generalmente son de gran longitud (10 metros o más) y son muy buscadas en una amplia variedad de comercios e industrias por su flexibilidad y alta resistencia a la tracción, al calor y a la abrasión.
Características y elementos importantes de la hoja
a) Longitud: la longitud total de la hoja determina el rango de mediciones que podemos efectuar con nuestra cinta métrica. De esta manera, a título ilustrativo:
- Una hoja de 3 metros es adecuada para medir muebles y gabinetes de baño/cocina.
- Una hoja de 5 metros es más indicada para realizar mediciones en interiores y en el armado de estructuras para la construcción en seco.
- Una hoja de 8 metros será ideal para construcciones en exteriores y jardines.
- Una hoja de más de 8 metros (algunos modelos llegan hasta 50 metros o más) es la más adecuada para proyectos en exteriores, agrimensura y paisajismo.
b) Unidades de la escala y exactitud: aunque en ciertas regiones las denominamos «cintas métricas», debemos saber que las hojas pueden venir graduadas en medidas métricas, imperiales o ambas, por lo que la disponibilidad de uno u otro modelo variará según la zona geográfica. Así, por ejemplo, es Estados Unidos predominan ampliamente las cintas con medidas imperiales, donde cada número corresponde a una pulgada y cada pulgada está subdividida en 1/16 o 1/32″ (según los requisitos de exactitud), mientras que en la mayoría del resto del mundo son muy habituales las cintas con medidas métricas, donde cada número corresponde a un centímetro y cada centímetro está dividido en marcas espaciadas por 1 milímetro. También son comunes las hojas que presentan una combinación de medidas métricas e imperiales, con un sistema en la parte superior de la hoja y el otro en la parte inferior.
c) Extensión máxima sin doblarse («standout«): es importante que consideremos el grado de rigidez de la hoja, es decir, hasta qué distancia esta puede extenderse sin perder rigidez y, por lo tanto, doblarse o plegarse. De hecho, cuanto mayor sea el standout, mejor será, especialmente si debemos medir objetos largos o altos, o si trabajamos solos, es decir, cuando no tenemos a alguien que nos ayude para sostener el otro extremo de la cinta. El standout está usualmente indicado entre las características generales de la cinta métrica y según los modelos puede variar entre aproximadamente 2 m y 3,30 m.
d) Facilidad de lectura: el alto contraste de colores entre la hoja y los números impresos en la escala también es un detalle a considerar porque afectan la facilidad de lectura de la cinta métrica. Siempre se prefieren los números grandes y de color negro, capaces de distinguirse perfectamente en una hoja de color amarillo o, mejor aún, de color blanco, que es el que usan algunas marcas reconocidas. Estas características son muy útiles en entornos hostiles (lluvia, polvo, tierra o arena en suspensión) o con poca luz.
e) Ancho: este es otro factor que estará estrechamente relacionado con la longitud, el standout y el tamaño de la escala. Las hojas más largas también tienen mayor ancho, que suele variar entre 19 y 25mm para la mayoría de los modelos convencionales. Cuanto mayor sea el ancho generalmente mayor será el standout, a la vez que también permitirá números más grandes y claros, facilitando la lectura.
f) Tope: el tope de una cinta métrica es la parte pequeña en la punta de la hoja que permite al usuario «enganchar» la cinta sobre un objeto, como muestra esta figura.
Además, evita que la hoja se pierda en el interior de la carcasa cuando se retrae, y hasta brinda una manera ingeniosa de dibujar círculos, convirtiendo así la cinta en un compás. Si bien el tope es esencial para casi todas las cintas métricas, resulta especialmente útil cuando trabajamos solos, por lo que un tope grande y sobresaliente puede ser una ventaja respecto de un tope más pequeño y convencional. La mayoría de los topes se fabrica en metal (acero o acero inoxidable) pero a veces pueden ser de plástico. Algunos fabricantes cubren parte de los topes con caucho para lograr un mayor agarre, pero muchas veces depende de lo que se esté buscando.
Carcasa
La carcasa, caja o «cuerpo» de una cinta métrica es uno de los factores más importantes a considerar al elegir una cinta. Si bien la carcasa no almacena nada que no resista los rigores del uso diario, algunas son más robustas que otras. La mayoría de las carcasas están construidas en plástico de alta calidad resistente al impacto, mientras que otras son de acero inoxidable para evitar la corrosión.
Por otro lado, algunos fabricantes ofrecen cintas de alta calidad que incorporan una carcasa fabricada de dos materiales. El primero es acero, acero inoxidable o plástico para conferir una mayor robustez, mientras que el segundo es por lo general un material elastomérico diseñado no solo para absorber el impacto, sino también para adaptarse cómodamente a la mano.
Muchos usuarios desconocen que la carcasa es realmente parte de la cinta métrica. Por lo tanto, al medir por ejemplo en una esquina, podemos añadir la longitud de la carcasa (la mayoría de las cintas métricas convencionales tienen una carcasa de 3 pulgadas de largo) en lugar de doblar la cinta en la esquina.
Elementos de la carcasa
a) Botón de bloqueo: las cintas métricas están diseñadas para retraerse automáticamente una vez extendidas, aunque algunos fabricantes no necesitan del botón para frenarse. Por lo tanto, todas incorporan en la carcasa un botón de bloqueo que se acciona con el pulgar.
En las cintas convencionales, este botón que vemos en la siguiente figura, es deslizable entre dos posiciones para cumplir dos funciones diferentes:
- Si se desliza hacia una de las posiciones cuando la hoja está extendida, bloquea la hoja a la longitud a la cual fue extendida. Si es necesario, la hoja puede seguir extendiéndose cuando el bloqueo está accionado, aunque la hoja avanzará más lentamente debido a la fricción que impone el mecanismo de bloqueo.
- Si se desliza hacia la posición opuesta, la hoja bloqueada se retrae automáticamente dentro de la carcasa.
Más abajo veremos mejoras deseables introducidas en este botón de bloqueo.
b) Gancho para el cinturón: dada la extrema conveniencia de tener una cinta métrica a mano en todo momento durante un trabajo, los fabricantes se han hecho eco de la necesidad de un acceso rápido y, excepto los más pequeños, casi todos los modelos incluyen un gancho para el cinturón -generalmente construido en acero- en uno de los laterales de la carcasa.
c) Cordón de sujeción: otro componente de practicidad apreciado por contratistas y trabajadores de la construcción en general es el cordón de sujeción incluido en muchas marcas reconocidas, que sirve tanto para colgar la cinta de la muñeca, lo que facilita el transporte seguro de un lugar de medición a otro, o bien de un clavo, gancho, etc., sobre la pared o cualquier otro elemento de alcance sencillo para tenerla siempre a mano.
Características recomendables para elegir la mejor cinta métrica
El perfeccionamiento y los adelantos no han dejado de lado las siempre fieles cintas métricas, permitiendo la incorporación de una serie de características que añaden una multiplicidad de beneficios. Según nuestros requerimientos, conviene tener en cuenta estas características si pensamos efectuar la mejor inversión con nuestra cinta métrica. Vamos a mencionar algunas y por último nos detendremos en una de ellas en particular.
a) Hoja con recubrimiento de nylon o poliéster: estos recubrimientos ayudan a reducir el desgaste de la hoja que tarde o temprano comienza a manifestarse mediante la oxidación y el descascarado. Por lo tanto, además de contribuir con una buena resistencia a la abrasión y durabilidad, los recubrimientos poliméricos de nylon o poliéster también brindan mayor reflectividad para mejorar las lecturas.
b) Carcasa construida en ABS: en DeMáquinasyHerramientas ya abordamos las ventajas del polímero ABS como material usado en herramientas, tanto manuales como eléctricas. Estas ventajas también se ven reflejadas en las cintas métricas provistas con carcasas construidas de ABS de alto impacto, y generalmente recubiertas con TPR (abreviatura de «caucho termoplástico»). Esta combinación ABS-TPR no sólo confiere a la carcasa un aspecto brillante como si fuera de cromo pulido, otorga características ergonómicas y evita que la cinta se resbale fácilmente de la mano, sino que además mejora la durabilidad del botón de bloqueo, que a diferencia de los de plástico de las cintas métricas convencionales, no se agrieta ni se rompe.
c) Tope magnético: muchas cintas métricas del mercado incorporan imanes en el tope para permitir fijarlas firmemente a objetos metálicos y así facilitar la medición cuando trabajamos solos. Por ejemplo, plomeros, instaladores de sistemas de climatización, electricistas, herreros, armadores de estructuras de steel framing, y todos aquellos que trabajen con metales encontrarán muy útil esta función. Sin embargo, la novedad ahora viene introducida por los topes con doble imán. Es decir que además de un imán en el extremo del tope hay otro debajo de este. Tales características son particularmente muy eficaces cuando el tope queda magnéticamente adherido a tuberías, perfiles, barras de refuerzo y conductos metálicos, por ejemplo.
d) Capacidad autofrenante, de bloqueo automático o «auto-lock»: esta característica que se está incorporando de manera creciente en las cintas métricas de marca confiable, modifica el aspecto y la función del botón de bloqueo descrito anteriormente.
Como apreciamos en la figura de abajo, ya no se trata de un botón deslizable de dos posiciones, sino de un botón fijo.
Una verdadera cinta métrica autofrenante tiene una hoja que se extiende manualmente sin presionar el botón (a diferencia de una cinta convencional) y se mantiene extendida a la longitud deseada gracias a un mecanismo por el cual una palanca bloquea automáticamente la hoja para que no se retraiga. En otras palabras, la hoja de la cinta métrica se bloquea a medida que se desenrolla. El botón únicamente se presiona cuando deseamos reducir la distancia a la que tenemos extendida la hoja, o bien para retraer totalmente la hoja dentro de la carcasa.
Esta característica autofrenante de las cintas métricas ofrece una serie de ventajas, tanto para la cinta en sí como para el usuario.
- En primer lugar, permite controlar la retracción de la cinta, lo que ayuda a prolongar la vida útil de la hoja.
- Además, el hecho de contar con un movimiento menos que debe efectuar el usuario, ahorra tiempo y evita que debamos andar a tientas con el botón de bloqueo deslizándolo hacia un lado o hacia otro.
- También contribuye a una mayor precisión en las mediciones, ya que el proceso adquiere más cualidades de «manos libres».
- El usuario dispone de una mayor autonomía. Imaginemos que tenemos que medir distancias largas, por ejemplo, el living-comedor de una vivienda o las dimensiones de un jardín y no disponemos de ayudantes. Con una cinta autofrenante será muy cómodo fijar la carcasa de la cinta en el suelo y de manera segura (por ejemplo, usando el cordón de sujeción) y avanzar por la distancia a medir con la hoja en la mano. Como la hoja se bloquea automáticamente al desenrollarse, no tenemos que regresar hasta la carcasa para accionar el botón de bloqueo (lo que provocaría la retracción de la cinta ni bien la soltemos) como ocurriría con una cinta convencional.
- Mayor facilidad de manipulación. Una vez que tomamos la medición, la hoja bloqueada se mantendrá firme en el lugar, permitiéndonos anotar la longitud medida o efectuar las marcas deseadas sobre la superficie medida.
Sin duda, conocer todas estas características nos ayudará a elegir la cinta métrica más adecuada para nuestro proyecto, ya sea doméstico o profesional. Y por sobre todas las cosas, también aportará lo suyo para decidirnos por una cinta métrica que nos durará muchos años, en lugar de adquirir una a la que nos veríamos forzados a reemplazar al poco tiempo de uso.