A pesar de su apariencia simple, los alicates (en muchos lugares también se denominan pinzas) son unas de las herramientas manuales más versátiles disponibles en el mercado, ya que emplean únicamente la fuerza de la mano para girar pernos y tuercas, doblar y cortar alambres y algunos metales, y sujetar diversos objetos.
En artículos anteriores de De Máquinas y Herramientas presentamos los diversos tipos de alicates, como así también algunas recomendaciones para su uso.
Como podemos apreciar, la variedad de alicates en el comercio es muy amplia, por lo que es importante saber cómo elegir el alicate más adecuado para nuestro trabajo en particular. Precisamente esto es lo que abordará este artículo, de modo que para comenzar, en el video de abajo veremos un breve resumen de los tipos de alicates ya mencionados, además de otros tipos y sus aplicaciones.
En base a lo que acabamos de ver en el video, a continuación detallaremos una guía sencilla para ayudarnos a elegir el alicate correcto.
Ante todo, debemos tener en cuenta que los alicates no sólo son necesarios para armar y desarmar cosas, sino que, por ejemplo, los plomeros los usan para sujetar tubos, los electricistas los emplean para cortar, empalmar y retorcer cables, y los trabajadores de la construcción los aplican a revestimientos aislantes para quitarles la cubierta. Además, un alicate es siempre útil en el hogar, ya que permite reparar artefactos diversos, extraer clavos de las paredes, reparar señuelos de pesca o, incluso, aunque no debe hacerse, usar como un martillo. En el campo de la artesanía, la joyería, el armado de bisutería y hasta la pesca existen pequeños alicates especiales que son imprescindibles, como también lo son en usos profesionales, como por ejemplo, entre los odontólogos.
Como esta es una guía básica vamos a concentrarnos solamente en los usos más comunes de los alicates de uso general que podemos adquirir en ferreterías, hipermercados o comercios afines.
En la selección de un alicate debemos considerar dos cuestiones fundamentales, que son:
a) Trabajo a realizar con el alicate
Puesto que los alicates tienen muchos usos, vale la pena conocer cuál es el que mejor se adapta a cada trabajo en particular. Por ejemplo, veamos algunas preguntas que deberíamos formularnos acerca del uso previsto para nuestro alicate.
- ¿Necesitamos sujetar, doblar o cortar componentes o cables/alambres con corriente eléctrica activa?
En este caso, un alicate universal con mango aislante será la herramienta indicada. Este tipos de mangos cumplen con normas internacionales y están diseñados para soportar tensiones de hasta 1000 voltios.
- ¿Tenemos que desarmar y/o reparar objetos pequeños o que exigen mucha precisión dentro de un espacio confinado, por ejemplo, componentes electrónicos, motores o relojería?
Los alicates de punta/boca fina y larga son el tipo de herramienta que necesitamos. Si además, los objetos que debemos reparar se encuentran en zonas de difícil acceso, los alicates curvos o de punta acodada serán aún de mayor utilidad.
- ¿Debemos apretar/aflojar tuercas o trabajamos normalmente con piezas que son de dos o más tamaños distintos y deseamos una herramienta que pueda adaptarse a todas?
En este caso, un alicate de articulación deslizante (hasta dos tamaños distintos) o alicate pico de loro y cremallera (varios tamaños distintos) podrá brindarnos las prestaciones que buscamos.
- ¿Nos interesan específicamente las operaciones de corte, ya sea de alambre, chapa u otras láminas metálicas delgadas?
Existe un gran grupo de alicates de corte de diversos tamaños, subdividido en alicates en corte frontal, corte lateral y corte diagonal, cada uno con funciones distintas que veremos más adelante.
- ¿Buscamos un buen alicate para nuestro trabajo de bricolaje en casa?
Nada mejor y más completo que un alicate universal, que nos permitirá cortar, sostener, dar forma y torcer/trenzar alambres comunes y conductores (en este último caso el mango debe ser aislante) y hasta podremos, en caso de apuro y si no disponemos de las llaves correspondientes, apretar y aflojar tuercas y pernos.
- ¿Deseamos efectuar un trabajo de plomería o soldadura que exige sujetar las piezas firmemente y no contamos con una morsa?
No solamente el ya mencionado alicate de pico de loro y cremallera será útil en este caso, sino mejor aún, un alicate de presión, que puede comportarse como una morsa portátil.
Acabamos de ver sólo algunos ejemplos, pero esto no es todo. Más adelante presentaremos una tabla con muchos más detalles para una elección exitosa de nuestro alicate.
b) Tamaño del alicate
Si sólo buscamos un alicate universal, por razones de seguridad conviene elegir uno de al menos 150 mm de largo o más. Esto garantiza que durante el uso de la herramienta, es decir, cuando se contraen las asas, no nos dañemos los dedos.
Sin embargo, en muchos otros casos debemos elegir el tamaño en función del trabajo a realizar, como vimos anteriormente. Por ejemplo, para tareas delicadas elegiremos los alicates más pequeños, y aquellas tareas pesadas relacionadas con la construcción o plomería, requerirán una herramienta de al menos 200 mm o incluso 250 mm de largo. Si usamos alicates con frecuencia por motivos de trabajo o hobby deberemos pensar en adquirir una caja o estuche con alicates de distintos tamaños. Hay muchos fabricantes que ofrecen juegos de alicates no sólo de tamaño variable, sino también de diversos tipos que cubren una amplia gama de servicios, tanto para el aficionado como para el profesional.
Ahora que tenemos una idea más concreta del alicate que debemos elegir, veamos en la siguiente tabla un detalle pormenorizado de los tipos más comunes de alicates recomendados para los trabajos más habituales.
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