Trabajar con pelacables es una tarea extensiva para los electricistas y técnicos en electrónica; sin embargo, por más práctica que uno tenga con esta herramienta, los accidentes pueden ocurrir igualmente. ¿Cómo prevenirlos?
En este artículo repasaremos los consejos de seguridad más importantes para utilizar en forma segura y correcta esta útil herramienta.
Errores al utilizar el pelacables
¿Qué puede salir mal al utilizar un pelacables? Pues muchas cosas. Depende del tipo de pelacable, pero generalmente los problemas aparecen por cortes producidos por el filo, por pellizcos provocados por las pinzas y electrocución por contacto con cables o alambres vivos. Veamos en detalle estos tres grandes errores de uso.
Cortes provocados por el filo del pelacables
El área de corte de los pelacables suele ser pequeña, y en aquellos que son de seguridad prácticamente están fuera del alcance del operario.
En los modelos con filo a la vista es posible que, inadvertidamente, el operario coloque allí una uña o el dedo mientras está trabajando con la herramienta. Este error ocurre principalmente por distracciones en el trabajo, o por cansancio debido a una tarea repetitiva.
Consejo: nunca trabaje en condiciones de distracción o cansancio, en especial si está manipulando un objeto cortante. Esto no sólo es válido para los pelacables, sino también para cualquier otra herramienta. Trabaje en lapsos de media hora y tómese un pequeño descanso; esto, además de incrementar su productividad, ayudará también a descansar su vista y a recuperar su capacidad de concentración.
Pellizcos provocados por la acción del pelacables
Aquí el accidente puede ocurrir debido a una distracción, a una imprudencia o por condiciones inadecuadas de trabajo.
En ocasiones, el técnico en electrónica o el electricista deben manipular sustancias tales como aceites (para pasar cables a través de conductos en la pared), que permanecen en las manos y luego impiden el correcto agarre del pelacables. Al operarlo, la mano puede resbalar y quedar atrapada en la zona de presión de la pinza.
Consejo: Siempre que manipule sustancias lubricantes, higienice sus manos. Recuerde que, de ocasionarse un corte, la presencia de productos extraños podría provocarle una infección de seriedad.
Electrocución
La tercera causa de accidentes con pelacables es el shock eléctrico provocado por el intento de trabajar sobre cables que están energizados.
Si bien un porcentaje de este tipo de accidente se produce por la mera negligencia del operario, la mayoría de los casos son producto de un descuido por parte de terceros o una falla en otro punto de la instalación que energiza el cable sobre el que se está trabajando.
Consejo: cerciórese siempre de que el cable sobre el cual trabajará está desenergizado, y de que no hay riesgos de falso contacto con otros cables energizados dentro del circuito. Si sospecha que la instalación no está en condiciones de seguridad óptimas, interrumpa el suministro de energía. Jamás opere el pelacables sobre un cable energizado a menos que la herramienta cuente con un certificado que garantice su aislación.
Pelacables de seguridad: ¿valen la pena?
La respuesta corta es: sí, si puede, cómprelos. La respuesta más larga merece un análisis más detallado de cuáles son las ventajas que se obtienen de la compra de este tipo de pelacables.
Para comenzar, el filo en estos modelos queda oculto, fuera del alcance accidental de la mano o los dedos. Esto permite operarlos con toda seguridad, sin riesgos de pinzamientos o laceraciones.
Otra ventaja importante es que generalmente estos modelos son ergonómicos, lo cual protege sus articulaciones haciéndolas trabajar de un modo más natural. Si usted es técnico en electrónica o trabaja como electricista, no dude en adquirir uno de estos modelos.
Pelacables tradicionales: ¿cómo usarlos apropiadamente?
De los pelacables tradicionales existen básicamente tres modelos, que difieren en su concepción y en el modo en que trabajan. Tenemos además el método tradicional del alicate y la pinza, pero sólo se debería emplear cuando no tenemos a mano un pelacables.
El modelo más compacto, que la mayoría de los electricistas elige, trabaja por presión de dos hojas cruzadas al modo de una tijera, y permite cortar un cable o eliminar su aislación.
Algunos modelos también permiten crimpear o instalar terminales en las puntas. Casi todos poseen distintos alojamientos graduados según el diámetro del cable, con lo cual la tarea de quitar el plástico se hace de un modo rápido y eficaz.
El principal problema con este modelo, en el que los filos quedan expuestos es que, ante un descuido, puede provocar laceraciones, cortes profundos, punciones y, en casos graves, la pérdida de un dedo.
Utilícelo siempre tomándolo del mango, con los dedos lejos de la zona de corte, y siempre en puño. Si con la otra mano debe sostener el cable, procure que la misma quede lejos de los filos.
Otro modelo de pelacable típico es el de la foto que vemos arriba. Este pelacables opera mediante la presión de dos palancas, y permite pelar automáticamente la punta de los cables, o cortarlos mediante una cizalla ubicada bajo la mandíbula.
Suelen ser robustos y confiables, y mucho más seguros en su operación que el modelo que vimos más arriba. No obstante, pocos modelos poseen un mango con aislación, y la cizalla posee los filos al alcance de un dedo, por lo que aún son relativamente peligrosas si se trabaja distraídamente o con cables energizados (algo que, como vimos antes, no debería realizarse con herramientas sin certificación 1000V).
Procure mantener siempre los dedos cerrados en puño, lejos de la zona de la cizalla.
Existe un tercer modelo, más reciente, que permite cortar o pelar cables sin exponer el dedo o la mano, aunque debido a su diseño, todavía es posible que ocurra un accidente, aunque si se la opera correctamente (tomando la herramienta por la punta) tal riesgo se minimiza.
Para cortar o pelar cables con este tipo de pelacables, tómelo siempre de la punta para cerrarlo, y con la otra mano haga girar el cable. Su operación es más cómoda si se realiza sobre una mesa o una superficie plana donde apoyar el pelacables.
En general, este tipo de modelos se clasifican de acuerdo a la capacidad de corte en milímetros, son fáciles de operar y particularmente apropiados para realizar empalmes, derivaciones y para pelar cables complejos como el sintenax.
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