Calcular la pintura necesaria para cubrir perfectamente una pared no es una tarea compleja, pero requiere tener a mano algunas herramientas, una tabla con los rendimientos de las pinturas de acuerdo a la superficie y la calidad, y por supuesto, algunos conocimientos de matemáticas.
¡No tema! En esta nota veremos algunos casos comunes y cómo resolverlos utilizando herramientas de medición láser para simplificar la tarea.
Calcular la pintura: una cuestión de tres pasos
1. Medición de la superficie total a pintar (o medición de paños parciales)
Para calcular la pintura necesaria para cubrir correctamente todas las paredes (y el cielorraso si es necesario) hace falta realizar algunas mediciones.
La superficie se mide en metros cuadrados (m²). Esta unidad surge de multiplicar los lados de un rectángulo. Así, un cuadrado de 1 m por 1 m nos dará 1 m² de superficie, mientras que otro de 2 m de lado tendrá 4 m²; 1 x 1 = 1; 2 x 2 = 4. A su vez, un rectángulo de 3 m por 4 m nos dará una superficie de 12 m².
Ahora bien, no siempre las paredes se pueden describir perfectamente como rectángulos: sucederá en muchas ocasiones que encontraremos cortes (salientes, depresiones y aberturas) que nos dificultarán la tarea. Para estos casos es necesario saber sumar o restar.
También puede ocurrir que deseemos pintar la pared de dos colores, en dos franjas. En ese caso es necesario calcular las áreas parciales y escribir en un papel el resultado junto con el color deseado.
¿Cómo encarar la tarea de medir? Antiguamente se realizaba con una cinta métrica, lápiz, una escuadra y mucha paciencia. Afortunadamente, con la invención de los medidores de distancia y los niveles de líneas láser este trabajo se simplifica enormemente.
Los niveles láser de líneas (que pueden ser de líneas rojas o verdes indistintamente) ayudan a proyectar líneas perpendiculares sobre las paredes. Aquellos que son capaces de proyectar líneas en derredor (a 360°) son los más indicados para tareas de pintura compleja (en donde es necesario pintar en franjas por ejemplo); aunque los modelos más básicos ayudan también enormemente si el trabajo de pintura es más sencillo.
A su vez, los medidores de distancia láser sirven para tomar medidas rápidamente, sin necesidad de llegar hasta la otra punta de la pared o resquicio que necesitamos medir.
Básicamente, debemos dividir las superficies principales en rectángulos indivisibles. Si llegara a existir un arco o cualquier otro corte curvo, bastará con dibujar un rectángulo que sea lo más inclusivo posible; de ese modo nos aseguramos de que sobre pintura y no nos falte.
Los resultados parciales son sumatorios siempre y cuando correspondan al mismo tipo de pintura. Por ejemplo, si tenemos una franja celeste y otra blanca, cada una dividida en tres secciones, se suman los resultados de las tres secciones de cada pintura por separado. Así, si tenemos para las franjas blancas tres paños de 10 m², 4 m² y 6,5 m², la superficie total a abarcar con esa pintura será de 20,5 m².
2. Cálculo del rendimiento de la pintura
El siguiente paso es determinar el tipo de superficie a pintar. Lo más común es tener una superficie lisa (paredes con revoque fino) aunque también es posible encontrarnos con paredes con salpicré, texturadas e incluso con ladrillo a la vista si se trata de paredes exteriores.
En la tabla que se ve aquí arriba (o a la izquierda en móviles y tabletas) vemos dos cuadros. El primero corresponde al rendimiento por litro según el tipo de pintura. El segundo nos indica un coeficiente de acuerdo al tipo de superficie.
Supongamos que tenemos una pared texturada de exactamente 10 m². Elegimos una pintura de primera calidad. En la tabla vemos que en principio necesitamos 1 litro. A continuación buscamos el coeficiente para el tipo de superficie: 0,55.
Para saber el total de pintura necesaria, debemos utilizar la ecuación siguiente:
((superficie a pintar en metros cuadrados) / (rendimiento)) / (coeficiente s) = total litros
Primero debemos dividir el total de metros cuadrados a pintar por el rendimiento hallado en la tabla. En este caso, nos da exactamente 1. Ese resultado ahora lo dividimos por el coeficiente s. Nos da un valor aproximado a 1,81. De ese modo obtenemos el total de pintura necesario: 1,81 litros.
3. Otros factores a tener en cuenta
Hay que tener en cuenta que el cálculo anterior es una aproximación, y que no tiene en cuenta factores secundarios como el tono de la pintura anterior o si la pared presenta deficiencias reparadas con enduido.
La pintura anterior es más oscura
En los casos en los que el tono de la pintura anterior es más oscuro al que pretendemos utilizar, habrá que dar dos manos de pintura. En ese caso, al valor obtenido hay que multiplicarlo por dos.
Hay que pintar una pared cuyo techo es inclinado
Esto es común en construcciones tipo chalet, en donde el techo (de machimbre), presenta una inclinación para escurrir las aguas.
Es en este caso donde las herramientas de medición láser hacen un papel estelar. En este caso podemos utilizar un medidor de distancia láser con inclinómetro incorporado. El mismo nos permitirá medir la inclinación exacta del techo y, si el modelo es avanzado, hasta nos dará la superficie total sin necesidad de calcularla a mano.
En caso de no poseer uno, también podemos hacer uso de los medidores digitales de ángulos, también llamados goniómetros. Estos instrumentos permiten medir con precisión cualquier ángulo, ya sea cóncavo o convexo.
Veamos un ejemplo concreto. Supongamos que dos de las paredes de la casa que debemos pintar tienen la geometría que se ve más arriba. Es un techo a dos aguas, con ángulos desiguales.
Para este caso no es necesario medir los ángulos; bastará con saber las medidas h, p y q.
Sabemos que la superficie de un triángulo rectángulo es igual a la mitad del producto de su base por su altura. Con esto en mente, la superficie total de esa pared será equivalente a la suma de sus dos triángulos rectángulos constituyentes:
Superficie r = (h x p) / 2
Superficie s = (h x q) / 2
Superficie total = superficie r + superficie s
Azulejos y cerámicas
Nos puede suceder que tengamos una pared que deseamos pintar, pero sabemos que más adelante colocaremos cerámicos o azulejos en la pared, hasta una altura ya determinada. Como la superficie en donde se colocarán esos cerámicos o azulejos no requiere pintura, debemos calcular la superficie libre.
Ahora bien, sólo tenemos un punto a cierta altura en la pared, indicando hasta dónde llegarán las cerámicas. Con un nivel de líneas láser es posible proyectar ese punto hacia ambos lados. Incluso, si la pared tendrá un paño de cerámicos o azulejos en un solo cuadrante de la pared (con lo cual el espacio libre se dará hacia arriba y hacia un costado), el nivel de líneas láser nos permitirá proyectar perfectamente las líneas perpendiculares.
Para calcular la superficie a pintar debemos calcular primero las dos áreas, y a la superficie libre restarle la que tendrá los cerámicos. ¡Algo muy sencillo!
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