¿Qué es una lijadora, cuál es su origen y cuántos tipos hay?

El trabajo de lijado, principalmente de la madera, pero también de otros materiales como plástico, metal, vidrio o cerámica, nunca ha sido demasiado favorecido, ya que se considera una actividad tediosa, que consume mucho tiempo y cubre de polvo todo lo que rodea la pieza de trabajo, por no decir al propio operario.

Más de un aficionado ha encarado esta ardua tarea con un taco de madera envuelto con un papel de lija. No obstante, los carpinteros y otros profesionales de la industria de la madera, del automotor o de la construcción saben que existe una herramienta práctica para obtener superficies perfectamente lijadas de manera sencilla, rápida, limpia y sin mayor esfuerzo: la lijadora.

Las primeras lijadoras aparecieron allá por 1820, eran máquinas estacionarias que funcionaban con un mecanismo de banda o tambor y se usaban únicamente en el ámbito profesional o industrial. Posiblemente eso sellaría el destino de las lijadoras estacionarias, de las que, como veremos más adelante, solo unos pocos modelos han llegado a las pequeñas y medianas empresas.

Hubo de pasar más de un siglo para que en 1927 apareciera la primera lijadora eléctrica portátil. Era una máquina de tipo banda construida en aluminio fundido a presión y pesaba unos impresionantes 6 kg. Esta característica la hizo poco apropiada para el hogar, por lo que su uso también quedó limitado a los profesionales, aun cuando muy pronto se desarrollaron otros modelos más livianos, y en los años ’30 se patentó el primer sistema de recolección de polvo.

Recién en la segunda mitad del siglo pasado el avance comenzó a cobrar notoriedad. Se introdujo la lijadora orbital, capaz de lograr un acabado más fino y de llegar a lugares estrechos, lo que entusiasmó a los aficionados al bricolaje que ya venían imponiendo sus requerimientos en un mundo donde el concepto del “Hágalo Usted Mismo” conquistaba adeptos.

Fue así como las viejas versiones de las lijadoras de banda también se hicieron portátiles y posteriormente aparecieron las lijadoras excéntricas, que en un comienzo eran neumáticas, pero luego se introdujeron versiones eléctricas. Más tarde, durante los ’90 surgió otro modelo para trabajos finos y delicados en esquinas: la lijadora delta.

Como no podía faltar en esta carrera, a fines de los ’80 se conocieron las primeras lijadoras inalámbricas. La escalada sigue hasta hoy, aunque la más moderna hasta el momento, la lijadora múltiple, ya tiene casi 20 años en el mercado.

Esta breve introducción nos habla de diversas clases de lijadora, así como de las diferentes maneras en que reciben energía para funcionar. ¿Cómo conocerlas a todas? Veámoslo con mayor claridad en la siguiente tabla.

Tipos de lijadoras

Aunque las clasificaciones son varias, la categoría principal que divide las lijadoras es por tamaño, es decir, portátiles y estacionarias.

Generalmente, las únicas lijadoras que se comercializan tanto en su versión portátil como estacionaria son las de banda.

Las demás son mucho más frecuentes en una versión u otra. Por ejemplo, las lijadoras orbitales, excéntricas, delta y múltiples son exclusivamente portátiles. El resto son lijadoras estacionarias con las siguientes tendencias: de banda, y banda y disco (banco), de disco y de husillo oscilante (pedestal o banco), de tambor, de bordes y de banda ancha (pedestal o industriales).

Tipos de lijadoras industriales

Las lijadoras industriales (muchas con tecnología CNC) y las de pedestal cubren una aplicación y un mercado diferente que va más allá del propósito de este artículo. Por lo tanto, vamos a concentrarnos específicamente en los modelos portátiles y de banco, que son los que están al alcance tanto del profesional como del aficionado, ya sea que se guarden en un maletín o se instalen en un taller.

Todas las lijadoras que veremos seguidamente y que están comercializadas por fabricantes reconocidos vienen en modelos que:

• Difieren en potencia, velocidad de oscilación, peso y dimensiones.
• Están provistas de:
  • Conexión y/o receptáculo para la extracción del polvo
  • Regulación electrónica de la velocidad
  • Sujeción del papel de lija mediante el sistema tradicional y/o por una tira de velcro
• Presentan empuñaduras ergonómicas para mayor confort del usuario.

Lijadoras orbitales

Por ser las primeras lijadoras portátiles, sus prestaciones han sido numerosas. Están provistas de una base rectangular en la que puede fijarse la cuarta parte (o la mitad, según el modelo) de un papel de lija de 9 × 11 pulgadas. Para crear la acción de lijado, esta base vibra rápidamente en pequeños círculos u órbitas de aproximadamente 2 mm de diámetro, y su diseño rectangular permite que la herramienta acceda a esquinas y bordes rectos.

Lijadoras orbitales

No son máquinas de lijado agresivo, por lo que no retiran grandes cantidades de viruta y generalmente dejan marcas menos visibles si se comparan con las lijadoras de banda o el lijado a mano en sentido perpendicular al grano de la madera.

Sus usos más recomendados son en lugares inaccesibles por otras lijadoras y cuando solo se requiere un lijado ligero. Son perfectas para preparar una superficie para pintar o sellar, o para eliminar una capa de pintura. También son útiles cuando se está instalando un piso de madera y se necesita lijar a lo largo de los zócalos y en las esquinas.

Lijadoras excéntricas

En lugar de una base rectangular, estas máquinas presentan una superficie de lijado circular, típicamente de 125 mm diámetro. También se encuadran dentro del grupo de las lijadoras orbitales, pero funcionan de manera diferente a las anteriores, ya que describen dos movimientos a la vez: uno es orbital y el otro es excéntrico, lo que les permite obtener un lijado casi perfecto, ya que las marcas que deja la órbita las borra después el movimiento excéntrico. De esta manera, la dirección del lijado por el grano de la madera es irrelevante.

Lijadoras excéntricas

Esta combinación de movimientos también logra una mayor remoción de material que, no obstante, si no se controla podría provocar daños al material. Para ello, las máquinas modernas cuentan con reguladores de velocidad variable que pueden lograr un lijado menos agresivo.

Precisamente por su base circular, estas máquinas no pueden acceder a esquinas ni bordes rectos, pero son ideales para piezas curvas. Además, su gran poder de remoción frente a las lijadoras orbitales les permite usarlas en trabajos grandes tales como el acabado de un piso de madera, y en trabajos pequeños tales como el lijado de muebles de cocina, por ejemplo.

Lijadoras delta

Si hay lugares difíciles y estrechos a los que una lijadora orbital no puede llegar, entonces las lijadoras delta son la alternativa eléctrica al lijado manual. Se fabrican en modelos estilizados semejantes a una herramienta eléctrica multiuso y están provistas de una base triangular que admite papeles de lija de ese diseño. Se usa exclusivamente para trabajar los detalles finos, como esquinas y rincones pequeños, por ejemplo, los marcos de las puertas.

Lijadora delta

Son livianas, usan muy poco papel de lija y cuentan con una buena recolección de polvo. Muchos operarios las usan también como sierra gracias a sus accesorios fácilmente desmontables, lo que las hace muy versátiles en un taller.

Lijadoras múltiples

Como toda herramienta para diversos usos, estas lijadoras pueden realizar distintos tipos de lijado porque combinan funciones que hemos visto hasta ahora en una sola unidad. Se comercializan en versiones con cable e inalámbricas, y están provistas de una base que se asemeja a una plancha para la ropa, con una punta triangular para el acabado fino en rincones, esquinas y lugares de difícil acceso, y una sección rectangular/cuadrada para el lijado en esquinas grandes y paralelo a bordes rectos.

Son muy buscadas por los entusiastas del bricolaje, y la versión inalámbrica (que vemos en el siguiente video) incorpora una batería de iones de litio que es intercambiable, es decir, puede desmontarse e instalarse en otras herramientas inalámbricas del mismo fabricante.

Algunos modelos de lijadoras múltiples también incluyen una base circular para usarlas como lijadora excéntrica, y otros modelos (los de tipo “mouse” o “ratón”) presentan un tamaño y potencia muy pequeños que permiten que la herramienta pueda tomarse con una sola mano, tal como si fuera el mouse de nuestra computadora, para usarla en detalles muy finos y/o lugares muy confinados.

Lijadoras de banda

En un artículo anterior describimos en detalle las lijadoras de banda, así como sus diversos tipos y clasificaciones. En esta oportunidad, por lo tanto, solo agregaremos que, puesto que tienen un mecanismo en el que la banda de papel de lija se desplaza por medio de los rodillos trasero y delantero siguiendo el mismo principio que la banda de rodadura de una topadora, las lijadoras de banda tienen una poderosa capacidad abrasiva que las hace muy adecuadas para la remoción de gran cantidad de material en extensas superficies planas.

Es por ello que, siendo una de las primeras lijadoras inventadas, no sólo conservan su gran popularidad para el trabajo de lijado grueso, sino que también son el tipo de lijadora que más versiones posee: portátil, de banco, de pedestal, industrial, eléctrica, inalámbrica, neumática, de banda estrecha y de banda ancha.

Lijadora de banda

Lijadoras de banda/disco para banco

Precisamente una variante de lijadora de banda es una compacta versión “2 en 1” para banco que combina las funciones de lijado por medio de banda y disco, muy útiles en talleres de carpintería.

La lijadora de disco, que suele tener un diámetro de entre 6 y 10 pulgadas, es ideal para lijar extremos cuadrados y curvos en tableros estrechos. Además, está equipada con una mesa de trabajo inclinable que admite un medidor de ingletes para que el disco pueda usarse en el lijado de precisión de piezas cuadradas y angulares. Por su parte, la lijadora de banda tiene una superficie grande y plana, con la que se pueden lijar tablones largos y anchos. En la mayoría de los modelos, la banda es ajustable para que pueda colocarse en dirección horizontal, vertical o en ángulo.

Lijadora de disco

La ventaja de combinar dos funciones en una también posibilita usar distintos papeles de lija: uno para trabajos de preparación (grano grueso o número bajo) y otro para trabajos de acabado (grano fino o número alto). Esto garantiza un uso sumamente versátil y un gran ahorro de tiempo, ya que elimina la necesidad de cambiar de papel de lija.

Las que acabamos de presentar son apenas una parte del vasto catálogo de lijadoras que ofrece el comercio, y a priori parecería que la variedad puede abrumar al potencial comprador de una máquina que debe adaptarse a sus necesidades, pero que no tiene en claro cuál elegir.

Volveremos sobre esto en futuros artículos, pero por el momento, a los efectos de resumir y ver gráficamente los conceptos aquí expuestos, podemos consultar la siguiente tabla orientativa.

Tipos de lijadoras